Ya hace tiempo que se consumieron nuestros amores, sin embargo, y a
pesar de los muchos días transcurridos, recuerdo con frecuencia aquellos
momentos en los que el desafecto jugó un papel tan destacado en
nuestras vidas. A pesar de este innegable fracaso, durante unos años vivimos muy compenetrados: yo había
encontrado en ti lo que buscaba y, al mismo tiempo, te ofrecía todo lo que tú deseabas.
Lamento hoy no haber contestado a tus angustiosas llamadas, ni haber leído ninguno de los mensajes que me enviaste, pero la situación era
la que era: me sentía atrapado por ella, que me prometió traerme el cielo a la
tierra, aunque este jamás de se movió de su sitio.
Hoy en la distancia, sé que me dejé arrastrar por
proposiciones más quiméricas que reales. A pesar de todo, estoy seguro que si intentase volver a
ti, me aceptarías, aunque las condiciones de hoy serían muy distintas a las de entonces. Instalado en la seguridad que dan las experiencias vividas, sin rubor alguno confieso que tú has sido la operadora de telefonía que mejor me ha tratado y menos ha quebrantado mis caudales, eso sí, hasta este momento...
Algunas -y algunos- hasta te llaman todos los días y desde países lejanos para convencerte de que lo suyo es lo mejor, sobre todo los de Jazztel. Y a horas intempestivas.
ResponderEliminarY es que hay "amores" que matan.
Un saludo.
Anda que he pensado en el desamor de verdad desde el principio, y te iba animar a que no te dejases vencer por la situación actual, ahora que se el final… ni lo duces, más vale lo malo conocido…
ResponderEliminarMe alegra tu regreso. Un abrazo.
Muy acertado.
ResponderEliminarEs una locura este mundo de la telefonía...
Ah, tus flores me gustan mucho. Soy una fan total delos Narcisos.
Abrazos!
;)
Muy acertado.
ResponderEliminarEs una locura este mundo de la telefonía...
Ah, tus flores me gustan mucho. Soy una fan total delos Narcisos.
Abrazos!
;)
Un final sorpresivo, jejejejejeje
ResponderEliminarMuy bueno. No me di cuenta hasta el final que hablabas de una empresa telefónica.
ResponderEliminarMuy original.
Me has dado una idea... quizás si que hablaré con alguien cada día.
ResponderEliminarGracias.
Yo ya he tenido cuatro divorcios como el tuyo.
ResponderEliminarMe ha gustado cómo lo has narrado.
Saludos
José Luis
Qué quieres que te diga... no soy fiel a ningún amor ligado a la telefonía, y menos cuando se trata de grandes multinacionales dispuestas a sacarte los cuartos a la primeras de cambio y sin ninguna explicación. Que si tiene usted activado noséqué, que si se ha conectado a internet sin tarifa de datos, que si el roadming, que si pàtatín y patatán. Soy infiel hasta el tuétano.
ResponderEliminarUn saludo
He seguido con mucho interés tu escrito y, la verdad, me ha encantado, sea real o imaginario.
ResponderEliminarFeliz fin de semana.
Un abrazo.
Precioso micr relato. Me voy a hacer asiduo de tu blog. Un abrazo, maestro.
ResponderEliminarBelmont
Snif snif y yo que pensaba otra cosa y estaba hasta preparando la cena de reconciliación, jeje. Muy bueno me ha gustado mucho un abrazo
ResponderEliminarEs una desgracia y una pena que estemos pasando por una situación tan deprimente y tan angustiosa. Siempre han existido las personas indeseables y rateras pero ahora. mucho más En estos casos hemos de armarnos de valor y mirar hacia delante. No es fácil, pero si posible. Abrazos
ResponderEliminarAbrazos
No te fies tu...
ResponderEliminarEso sí, buen giro dado..
Gracias por llegar a mi blog.
También me quedo.
Saludos
Feliz fin de semana.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buen fin de semana.
ResponderEliminarBesos
Los amores pasados en el recuerdo se transforman en los mejores soportados.
ResponderEliminarUn abrazo.
Jajajajaja.... tu final estuvo de pelos, me has tenido haciendo las cejas así o_Ö, u_u y plop jajajajaj besos muy bueno Antorelo :*
ResponderEliminarFeliz puente y feliz fin de semana.
ResponderEliminarUn abrazo.
De nuevo buen fin de semana.
ResponderEliminarSaludos